Opinión.
“¡¡Atención,
señora, ha llegado el tapicero…!!”. Este era el repetitivo anuncio,
procedente de la estridente megafonía de una furgoneta que
periódicamente circula por las calles de la ciudad en la que
vivo (y me imagino que por otras demarcaciones territoriales), que me
daba pie para hacerme la siguiente reflexión: ¿Cómo es posible que, a
estas alturas del siglo XXI, todavía no esté resuelto el conflicto de
género? Resulta evidente que el referido reclamo
publicitario, en ningún caso, va dirigido al hombre, sino a la mujer, y
que el noble oficio de tapicero, asimismo, se considera patrimonio del
varón. Si ya hay mujeres militares, boxeadoras, astronautas, aviadoras,
camioneras, taxistas, bomberas, etc., ¿por
qué no puede haber damas tapiceras?
El
profesional que presume de tapizar (‘a precios de fábrica’), sillas,
sofás y demás, parece ignorar que la sociedad occidental está inmersa en
la plena equiparación laboral de hombres y mujeres y que,
por tanto, debería corregir su mensaje para no ser tachado de
discriminatorio. Atrás han quedado, por ejemplo, los discursos de aquel
gallego bajito que mandaba tanto, y que siempre empezaba sus patrióticas
soflamas con la recurrente cantinela de ‘¡¡Españoles…!!’;
como si las españolas solo sirvieran para ejercer de dóciles amas de
casa, ser de Acción Católica o de la Sección Femenina. Queda, pues,
claro, que se tienen que seguir corrigiendo estas reminiscencias del
pasado, sencillamente, porque tod@s somos iguales.
Sin
embargo, confieso que no puedo soportar que, sobre todo, los políticos y
sindicalistas repitan machaconamente expresiones, tales como,
‘compañeros y compañeras’, ‘ciudadanos y ciudadanas’, ‘amigos
y amigas’, etc., etc.; si bien, no me parece del todo mal empezar un
parlamento haciendo referencia a las ‘señoras y señores’ presentes en el
acto. Es mi amigo (“El Cínico”), quien nuevamente mete baza en mis
asuntos para apuntarme que, según el acervo
popular, siempre prevalecerán expresiones machistas, como la del
afilador, ya que “nunca he visto a una mujer tirando de rueda de afilar
por la calle”. A mi amigo le informaba que Ourense es la cuna de los
afiladores, razón por la que se llama ‘Terra
da chispa’.
LOS PROMETIDOS PUESTOS DE TRABAJO DE AMAZÓN Y EL GRAN FOLLÓN DEL PSOE.-
En El Prat Radio, los tertulianos debatimos
sobre la promesa de Amazón de dar empleo a 700 pratenses del total de
1.500 que está previsto que trabajen en este gigante del comercio
electrónico norteamericano para
el sur de Europa, centro logístico que se está construyendo en el
parque de negocios Mas Blau II. Los tertulianos alertamos que la entrada
en servicio de esta empresa, prevista para octubre de 2017, podría
provocar una saturación del tráfico en la zona, y
advertimos que la presencia de la estación de la L-9 no será suficiente
para resolver las deficiencias del transporte público.
Los
tertulianos también comentamos largo y tendido el tremendo guirigay que
se ha montado en el PSOE. La falta de un verdadero liderazgo, la
ausencia de una necesaria regeneración y la incapacidad para
resistir el empuje de las nuevas formaciones políticas, son factores
que no son ajenos a la actual situación de un partido, en el que los
jubilados marcan el paso, con Felipe González a la cabeza y con la
aquiescencia de la baronesa del sur, Susana Díaz. Sobre
la posterior dimisión de Pedro Sánchez, que se producía un día después,
no tuvimos opción de opinar. El tiempo no dio para más y solamente
pasamos de puntillas por el otro gran embrollo pendiente: el referéndum
de Cataluña, asunto que está interconectado con
la galopante crisis del PSOE, el partido que ha quedado partido.
Manuel Dobaño (Periodista). También puede leer este artículo en El Prat al Día.
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